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Cómo seleccionar la bomba Husky correcta
Las bombas neumáticas de doble diafragma son las preferidas en muchas industrias, ya que demuestran un buen rendimiento en una amplia gama de aplicaciones.
Las bombas AODD Husky de Graco pueden manejar una gran variedad de productos químicos, caudales y viscosidades. Pero ¿cómo elegir la mejor bomba para su aplicación específica? He aquí algunas pautas que pueden ayudar.
Las bombas Husky neumáticas de doble diafragma (AODD) de Graco están disponibles con carcasas de metal y plástico, admiten bolas, asientos y diafragmas de diversos materiales, y ofrecen una amplia gama de caudales y tamaños. A la hora de seleccionar la bomba Husky adecuada para su aplicación concreta, es necesario responder a algunas preguntas.
¿Qué fluido bombeará? Cada fluido tiene sus propias características. El bombeo de agua requiere un enfoque diferente al de la cola, el epoxi, la pasta de tomate o un ácido. Comprender las características del fluido es el primer paso para elegir una bomba adecuada.
¿Cuál es la aplicación? ¿Está alimentando una bomba u otra máquina? ¿Está trasvasando fluido, descargando un tanque o se trata de una aplicación de impregnación o de otra índole?
¿Cuál es el diámetro de las tuberías? Una bomba de doble diafragma suministra mucho volumen, pero a baja presión, por lo que el diámetro del tubo debe ser lo más grande posible. ¿Qué volumen necesita para su aplicación?
¿Dónde estará colocada la bomba? ¿Está creando altura de aspiración? ¿Qué longitud de mangueras de aspiración pretende usar? La longitud de descarga es un factor importante; cuanto más larga sea la longitud de descarga, más pérdidas de presión habrá.
¿Funcionamiento intermitente o continuo? Si su bomba va a funcionar las 24 horas del día y los 7 días de la semana, es posible que tenga que utilizar una velocidad de ciclo menor, lo que implica una bomba de mayor tamaño y, por tanto, un precio más elevado. Sin embargo, una menor velocidad de ciclo conlleva un menor desgaste de las empaquetaduras, los diafragmas, los asientos y las bolas, lo cual comporta una reducción de los costes de mantenimiento.
¿Necesita la certificación ATEX? Si la bomba va a funcionar en un entorno peligroso, es posible que deba elegir una bomba conforme a ATEX. La certificación ATEX garantiza que el equipo funcionará de forma segura en un entorno explosivo sin provocar accidentes, si es que se utiliza según las recomendaciones del fabricante.
Un ejemplo: ácido sulfúrico
Respondamos a estas preguntas con una aplicación típica: el bombeo de ácido sulfúrico. El primer paso es consultar la ficha técnica del ácido sulfúrico. El ácido sulfúrico tiene una baja viscosidad de 26,7 cPs a 21 °C. Conocer la viscosidad es especialmente relevante a la hora de elegir el material adecuado para la bola y el asiento de la bomba.
La densidad también es importante porque determina la altura máxima de aspiración de la aplicación. El ácido sulfúrico tiene una densidad de 1,84 kg/l. Al ser casi el doble que la del agua, el ácido sulfúrico es, por tanto, un fluido pesado. Esto influirá en las bolas que se elijan para la bomba.
En segundo lugar, consulte la Guía de compatibilidad química de Graco. Le permite ver enseguida qué metales y plásticos son compatibles o no con el ácido sulfúrico. Según esta guía, el ácido sulfúrico es compatible con el polipropileno, Santoprene®, PTFE y Viton®. El coste entra en juego de inmediato, ya que el Viton® es el más caro de los cuatro, y el polipropileno el más barato.
El siguiente paso es saber a qué temperatura se va a bombear el ácido sulfúrico, ya que el polipropileno se derrite por encima de los 65 °C. Si su ácido sulfúrico se bombea a 75 °C, tendrá que plantearse un plástico más resistente a la temperatura, como Kynar® (PVDF) o PTFE, o un metal como Hastelloy®, aunque esto suponga una desventaja en cuanto al precio. Pero si su aplicación funciona a una temperatura ambiente de, por ejemplo, 20 °C, podría utilizar una bomba con cuerpo de polipropileno y piezas interiores de Santoprene.
Una aplicación típica para bombear ácido sulfúrico
Entramos en más detalles sobre la aplicación: supongamos que quiere bombear ácido sulfúrico a 20 °C desde un tanque de 1200 litros para alimentar una unidad de acondicionamiento que, a lo largo de un día, llenará recipientes de 5 litros a una velocidad de 30 litros por minuto. El tanque de alimentación tiene 3 metros de altura y hay un metro de tubería horizontal seguido de un tubo de descarga de 5 metros.
A una velocidad de 30 litros por minuto, su bomba tendrá un ciclo de servicio de tan solo 40 minutos, por lo que funciona de forma intermitente. Utilizando la Hoja de cálculo de pérdidas por aspiración de Graco, descubrirá que las pérdidas por aspiración estimadas para esta configuración son de 0,59 bar. Esto deja 0,41 bar restantes, que debería bastar.
Advertimos que con alturas de aspiración elevadas y fluidos pesados, como el ácido sulfúrico, conviene poner una válvula antirretorno de salida en el fondo del bidón de 1200 litros. De este modo, la aspiración con líquido será siempre mayor que la seca. Otra recomendación es bajar la bomba si es posible. Esto no solo garantiza que se aproveche la gravedad, sino que también permite un cebado de la bomba.
¿Qué bomba Husky elegir para bombear ácido sulfúrico?
Ahora ya tiene una idea más clara de los detalles de la aplicación y de los materiales que son compatibles con el ácido sulfúrico. Así que es el momento de considerar las bombas Husky que se ajustan a las especificaciones.
De la amplia gama de bombas Graco Husky, varias serían factibles:
- Husky 1050 de 1 pulgada
Para esta aplicación de ácido sulfúrico, la bomba tendría un volumen de 0,64 litros por ciclo y funcionaría a 47 ciclos por minuto. Sus piezas interiores de Santoprene® o Viton® ofrecen flexibilidad, larga vida útil y resistencia a tensiones mecánicas.
- Husky 1590 de ½ pulgada
Con esta bomba más grande, el volumen aumentaría a 1,96 litros por ciclo y funcionaría a solo 16 ciclos por minuto. Es un valor bajo, pero tiene la ventaja de que hay menos pulsaciones. La Husky 1590 sería una solución perfecta para una aplicación de servicio continuo, o si se necesita una bomba de funcionamiento lento. Pero para una aplicación intermitente, la Husky 1050 cumple, y también es más barata.
- Husky 15120 de 1½ pulgada
Esta bomba ofrecería un volumen aún mayor de 2,4 litros por ciclo a 12,5 ciclos por minuto. La razón para considerar la Husky 15120 es que es muy resistente a los ácidos. Esto se debe a que el centro está hecho de una sola pieza completamente de polipropileno. Además, las secciones clave del cuerpo son de polipropileno reforzado con fibra de vidrio para darle mayor fuerza y resistencia química. Esta bomba también está disponible en polipropileno conductivo o Hastelloy® para aquellas aplicaciones en las que se requiera la homologación ATEX. El Hastelloy® es un metal que ofrece una resistencia química y mecánica sumamente alta, pero es muy caro.
- La Husky 1040 ChemSafe
Esta es otra bomba diseñada para manejar ácidos durísimos. Tiene un cuerpo totalmente encapsulado, hecho de PTFE (para soportar temperaturas de hasta 100 °C) o de polipropileno (para temperaturas de hasta 70 °C).
Todas las bombas Husky son muy fáciles de mantener. Para acceder a la válvula de aire en caso de sustitución, solo hay que quitar cuatro pernos. Las válvulas piloto también son fácilmente accesibles. Las bombas vienen lubricadas de por vida. Sin embargo, para el mantenimiento de la válvula de aire o de los componentes internos, se puede aportar un poco de grasa de litio. En la parte trasera de la bomba se encuentra el silenciador, al que también es fácil acceder. Basta con desenroscarlo para comprobar si hay humedad o grasa en el suministro de aire. Siempre se recomienda usar aire comprimido seco y limpio.
Selección de las bolas adecuadas
Con un fluido de alta densidad, como el ácido sulfúrico, se necesitará una bola más pesada, p. ej., de Viton® o PTFE. El Viton® es más caro que el PTFE, pero al ser más denso y, por tanto, más pesado, ofrecerá una mejor aspiración. Esta es una consideración clave para la aplicación de ácido sulfúrico con su altura de aspiración de 3 metros. Santoprene® no sería una buena opción para esta aplicación, ya que el Santoprene es más ligero que el agua. Las bolas de Santoprene® flotan en la mayoría de fluidos.
Resumen de las bombas Husky para la aplicación de ácido sulfúrico
Para una solución de bajo coste y sin homologación ATEX:
- Husky 1050 con cuerpo de polipropileno + piezas internas de Santoprene®/Viton®
- Husky 1590 con cuerpo de polipropileno + piezas internas de Santoprene®/Viton®
Para una bomba de bajo coste con homologación ATEX:
- Husky 1050 con cuerpo de polipropileno conductivo + piezas internas de Santoprene®/Viton®
Para una bomba para altas temperaturas sin homologación ATEX:
- Husky 1050 con cuerpo de PVDF + piezas internas de PTFE
- Husky 1590 con cuerpo de PVDF + piezas internas de PTFE
Para una bomba para altas temperaturas con homologación ATEX:
- Husky 1050 con cuerpo de Hastelloy® + sección central de polipropileno + piezas interiores de PTFE
Para una bomba para productos químicos de bajo coste sin homologación ATEX:
- Husky 15120 con sección central de polipropileno + piezas internas de Santoprene®
- ChemSafe 1040 con cuerpo completo de PTFE + diafragma de PTFE
- ChemSafe 1040 con cuerpo completo de polipropileno + diafragma de PTFE
¿Cuánto aire consumen estas bombas?
Una bomba de doble diafragma consume mucho aire. Así que no olvide añadir a sus cálculos el coste de un compresor de aire. Normalmente, una bomba en funcionamiento continuo podría consumir fácilmente entre 750 y 850 litros por minuto. Sin embargo, en la práctica esto es muy poco probable, ya que estas bombas suelen funcionar de forma intermitente. Su proveedor podrá aconsejarle sobre el mejor compresor de aire para su aplicación concreta.
¿Necesita ayuda para configurar su bomba?
Graco ofrece algunas herramientas útiles en su web. La Guía de compatibilidad química es una excelente guía general para seleccionar una bomba y determinar los materiales compatibles, no solo para el fluido que se bombea, sino también para el producto de limpieza que se vaya a utilizar. Otra guía muy práctica es la de materiales de construcción, que le permite encontrar la combinación más rentable para su aplicación. Y, por último, pero no por ello menos importante, el selector de bombas de diafragma neumáticas le ayudará a elegir la bomba adecuada para su aplicación específica.
Si necesita más ayuda o desea ver una demostración de una bomba AODD Husky, rellene el formulario de contacto de más abajo.
Santoprene® es una marca registrada de Advanced Elastomer Systems, L.P. Hastelloy® es una marca registrada de Haynes International, Inc. Viton® es una marca registrada de The Chemours Company. Kynar® es una marca registrada de Arkema Inc. Hytrel® es una marca registrada de DuPont.
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